La minería utiliza placas de acero al carbono en equipos, incluyendo trituradoras, transportadores y maquinaria de manejo de mineral. Estas placas deben tener alta resistencia, buena resistencia al desgaste abrasivo y tenacidad al impacto para soportar el difícil entorno de trabajo en las minas. Estos aceros al carbono se someten a tratamientos térmicos para mejorar sus características mecánicas. Las placas también son resistentes al ataque por corrosión debido a los minerales y productos químicos presentes en el entorno minero. Pueden fabricarse en componentes de tamaño superior para las operaciones mineras. La eficacia y fiabilidad de la industria minera se ven mejoradas con el uso de placas de acero al carbono, ya que se consume menos tiempo y recursos en el mantenimiento y servicio de los equipos